EntrevistaPortadas

UNA MUJER POWER Y SU HISTORIA CON EL CÁNCER DE MAMA

Andrea Alarcón Goldenberg, chillaneja activista

Con motivo de la sensibilización sobre el cáncer de mama, durante el mes de octubre, Andrea Alarcón, ingeniera chillaneja, relató cómo su experiencia de padecer esta enfermedad la motivó a sensibilizar a diversas mujeres sobre la temática, a través de talleres donde su historia es una inspiración para tomar consciencia de la importancia de la autoevaluación preventiva y la detección precoz.

Cada vez que llega octubre las campañas informativas sobre esta enfermedad se han ido acentuando con los años. Y es que hablar de cáncer de mama, es referirnos a la primera causa de muerte en las mujeres tanto en Chile como en el mundo. Según cifras del Ministerio de Salud (Minsal), actualmente cerca de mil mujeres muere cada año y el rango etario de riesgo ha aumentado hacia la población más joven.  

Por tal motivo quisimos conversar con una profesional chillaneja que hace dos años recibió este diagnóstico.

SITUACIÓN INESPERADA 

Andrea Alarcón es una mujer de 43 años, ingeniera en Administración de Empresas con mención en Recursos Humanos, madre de dos niños, la que, durante diciembre de 2020, en plena pandemia, recibió la noticia que padecía cáncer de mama. “Sin duda fue un shock, un escenario inesperado que me cambió la vida. La verdad, sentí como se paralizaba todo”, señaló sin perder su sonrisa.

En primera instancia, Andrea relató que, al impacto de la noticia, se unió un panorama desolador, ya que además de necesitar mucha ayuda profesional no encontró referentes sobre la enfermedad o comunidades de acompañamiento y apoyo. “Cuando te encuentras frente a una enfermedad así, no solo es importante la asistencia médica, sino que el conocer mujeres que hayan pasado o estén pasando por esa situación de vida. Con el tiempo me he dado cuenta de que es una instancia de gran ayuda”, sentenció.

Pero lejos de sumirse en la tristeza o angustia, Andrea descubrió la fuerza que tenía, la que la inspiró en convertirse en el referente que ella buscó, pero siendo una activista para muchas mujeres que fue conociendo en el camino. “Asumí un rol educativo y de acompañamiento de pacientes. Estoy haciendo todo lo que me hubiese gustado tener cuando fui diagnosticada, mostrar la realidad”, explica.

RED CON SENTIDO SOCIAL

Fue así como creó su Instagram @andreamujerpower2021 con el objetivo de hacer del cáncer de mama un tema mucho más común y abierto, derribando mitos. “Siento que mientras más se haga ruido y se converse el tema, se llegará a una mayor cantidad de personas que pueden ser diagnosticadas a tiempo, vale decir, entregarle las herramientas para que logren saber que algo raro está pasando y actúen con rapidez”, señala.

Desde su propia experiencia, Andrea asegura que cualquier mujer puede encontrarse el día de mañana en esa situación. “Uno nunca se imagina que el cáncer va a tocar tu puerta. Uno dice ‘ojalá que a ninguna conocida le pase’, pero nunca te imaginas que esa conocida eres tú misma”.

Por esa razón, destaca la importancia de estar alerta. “El cáncer no es una sentencia si es que lo detectas a tiempo. Hay que estar alerta a los síntomas como retracción de pezón, piel de naranja, cambio en el tamaño de las mamas, enrojecimiento… cualquier anormalidad en las mamas”, indica Andrea y agrega que “el autoconocimiento es básico, sin embargo, no reemplaza la mamografía”.

Cuéntanos sobre tu activismo respecto del tema

Durante estos dos últimos años he realizado varios cursos de capacitación para prepararme en liderazgo, comunicación, acompañamiento a paciente oncológico y además de coach motivacional y de vida. Eso me ha permitido tener muchos proyectos en mente que he venido concretando en la Región de Ñuble a través de diferentes plataformas como radio, prensa y televisión en comerciales sobre la prevención del cáncer de mama.

A lo anterior se suman varios talleres en forma online, también a través de una empresa de psicólogos de la cual yo soy parte como agente motivacional. Dictamos charlas online a través de la Universidad de Valparaíso. Asimismo, he organizado encuentros presenciales (tardes recreativas) con mujeres que tuvieron cáncer de mama y soy directora de “Abrazar la vida por un día más” que es una agrupación oncológica del Hospital Herminda Martin donde se abordan todos los tipos de cáncer que se ven en la Región de Ñuble.

También participé en el 1º Congreso Nacional del Cáncer de Mama y he estado presente en muchas actividades a nivel paciente, tanto en Concepción como en Santiago.

Para más adelante tengo como objetivo seguir haciendo capacitaciones como agente motivacional y coach de vida.  

CREAR CONCIENCIA

De la misma manera, apunta a que el cáncer se debería tratar como un tema de la sociedad en su conjunto, pues no basta que las pacientes con este tipo de cáncer sepan, en palabras simples, qué sucede con ellas, sino que la población, específicamente la familia cercana, debería estar concientizada de cómo abordar estos temas. 

De acuerdo a lo anterior, comenta con pesar cómo eran comunes los episodios en que la gente se daba vuelta en la calle a mirarle, lo que ella llama con cariño, ‘su peladita’. “Ahí queda expuesta la falta de información. No saben que la paciente está viviendo un montón de cosas. Necesita apoyo, no que la excluyan o la miren como bicho raro. Lamentablemente las mujeres que lo padecen tienen que lidiar con una sociedad que las mira con pena”, manifiesta y enfatiza que la empatía es primordial, puesto que “te afecta a nivel físico, emocional y económico… te afecta en todos los sentidos”, asevera.

Asimismo, Andrea dice que el respeto es esencial. “Cada paciente lo vive de distintas formas. Por eso incentivo el trato personalizado con cada mujer que tiene cáncer, considerando sus propias vivencias y nunca mirarlas con lástima, ya que también en este proceso se ve afectado el amor propio y el autoestima”, subraya.

Como mensaje final a todas aquellas mujeres que han sido diagnosticadas con esta enfermedad, recomienda “escucharse siempre, en cada etapa que va avanzando, vivir un día a la vez, paso a paso y evitar pensar en lo qué pasará más adelante. No vivirlo sola, acompañada de su entorno familiar y de otras pacientes se hace mucho más fácil el proceso porque se puede entender lo que se vive”, finaliza Andrea Alarcón con una sonrisa acogedora y voz calma, instando a las mujeres de Ñuble a que se sumen a esta red de apoyo.

Mostrar más
Botón volver arriba
Cerrar
Cerrar