Margarita Donoso, administradora general del Estadio Español de Linares
“Soy una mujer absolutamente realizada”
Nos recibe algo nerviosa, no está acostumbrada a ser el foco de la atención, pese a ser la mujer que toma las decisiones. Así es Margarita Donoso Urzúa, administradora general del Estadio Español de Linares, quien está a cargo y es la responsable de los eventos que se realizan allí. Casada y con 3 hijos, esta mujer de 38 años se la juega por hacer brillar uno de los recintos con más historia de Linares.
Estando a cargo del Estadio Español, ¿cómo realizas tu labor, tienes un equipo de apoyo?
Sí. Nosotros tenemos un equipo base. Son dos empresas acá, una es la inmobiliaria, que es el restorán, el centro de eventos como tal y está el Estadio Español que es todo lo que es área y coordinación deportiva. En la inmobiliaria hay 25 personas y en el Estadio son 18. Son equipos que están absolutamente formados, hay jefes de cada área. Hay gente que lleva trabajando acá 11 años. Entonces hemos logrado mezclar gente que lleva mucho tiempo con gente nueva y lo hemos conseguido. Es un trabajo súper dinámico, todos los días son cosas diferentes y requerimientos distintos.
En el área deportiva, imagino que tienes que aprender a interactuar con las diferentes ideas y novedades que pudiesen llegar…
Absolutamente. Y a veces también estar muy atenta a los requerimientos de las personas, en el fondo qué es lo que quieren, porque yo no saco nada con impartir un taller que no tendrá mucho público. Hay talleres novedosos, como por ejemplo uno de inclusión que se llama redes, que cuenta con la asistencia de niños que tienen problemas de lenguaje, sociales o conductuales, hay diferentes especialistas que hacen estos talleres, que motivan a estos niños con terapias entretenidas, la idea es trabajar y superar esas dificultades.
¿Cómo ha sido este proceso de ser líder, de trabajar con un grupo de gente que puede ser diverso?
Yo siempre he dicho que un buen líder no es una persona que pone su cargo encima. Un buen líder es la persona que sabe formar equipo, que sabe trabajar a la par con su gente. Y yo creo que mi forma de ser, hace que la gente me crea. Yo cuando llegué a trabajar acá, el personal decía “va a durar un mes y se va a ir”.
¿Por qué decían eso?
Porque en el fondo, encontraban que la gente era jefe acá, tiraba el cargo encima, decían: “Yo soy Ingeniero comercial” o “yo soy ingeniero civil y sé manejar empresas”, pero en el minuto cuando las papas queman, no sabían cómo proceder. Entonces como soy mucho más operacional en el fondo y estoy con ellos, por ejemplo, si hay que servir un plato porque muchas veces están ahogados, yo voy y le digo yo los ayudo. O los hago participar de las reuniones, de ver las cosas buenas y malas. Yo creo que sabemos trabajar en equipo. Para mí es súper importante cada persona que trabaja acá, porque cada uno cumple un rol diferente y si me falta uno, como que se me empieza a desgranar mi racimo de uva.
Llevas más de 5 años trabajando acá. Pero antes ¿en qué trabajaste?
Trabajé en el Hotel del Casino y mi escuela fue Paulo Russo, para mí y de verdad lo digo fue la mejor escuela; por la estructura, por lo entretenido, por la cantidad de lugares que conocí. Él hacía sentir que uno era importante en su equipo y si uno no estaba, la cosa no funcionaba bien y lo hacía con todos, desde la persona que lavaba la loza hasta la persona que vendía el matrimonio. Entonces uno se creía el cuento y yo creo que aquí, mi gente se siente importante. El garzón siente que si él no está o él no puede atender a su cliente, a lo mejor el otro no lo va a hacer tan bien como él. Entonces ese es el objetivo cuando yo busco el perfil de la gente que quiero que trabaje acá.
Hay alguna experiencia en particular que te haya marcado en estos 5 años, algo que te haya llamado la atención…
En general, cómo hemos ido creciendo. Cuando yo llegué esto era un circo pobre, en qué sentido, porque yo tengo varios jefes. No es solo que yo me remito a darle las explicaciones solo a uno, acá yo tengo que darle explicaciones a 9 jefes, todos con diferentes personalidades y opiniones. Entonces al principio eso fue como “wow” y todos me preguntaban cómo era capaz de trabajar con 9 personas. Creo que son formas de ser, uno puede dar su punto de vista siempre respetuosamente y pienso que ellos creyeron en mí también. Pero fue como complejo trabajar con 9 y hombres, en ese minuto, porque ahora hay una mujer, era difícil, eso fue lo que más me ha marcado. Y lo otro, en experiencias difíciles que han pasado acá, una vez entraron a robar y le sacaron la “mugre” a dos guardias que trabajan con nosotros hace mucho tiempo, les quebraron los dientes y los dejaron en el hospital. Y eso para nosotros fue muy terrible, todos apoyamos muy unidos, por eso te digo que aquí hay un gran equipo humano.
Eso de trabajar con 9 jefes y varones. ¿Crees que también ha sido una enseñanza para ellos?
Sí, de todas maneras. Ellos a lo mejor antes decían, esto va a hacer así y así, y yo los cuestionaba. Yo soy súper aguja, entonces les respondía: “y quién les dijo que eso estaba bien”. En el fondo de buena manera, puedes ir haciéndolos entender que también hay que ir acorde con los nuevos tiempos, había directores que llevaban muchos años y que estamos hablando que tienen 70 años. Y ahora hay mayores y gente joven, entonces ha sido una buena mezcla. Obviamente que discusiones siempre hay, pero siempre en el tema laboral las cosas se conversan y resuelven hacia adentro.
Con lo dinámico de tu trabajo, ¿cómo lo puedes desempeñar sin afectar tu vida personal?
Yo creo que la gran ventaja es que mi marido y mi familia me han apoyado cualquier cantidad, porque en el fondo esta es una pega 24/7 y muchas veces yo tengo que venir en la noche, entonces si mi marido me dijera que no puede quedarse con los niños, tendría limitaciones y uno se va haciendo a un lado. Y lo otro es que yo soy talquina, yo me vine a vivir a Linares y esta ciudad es todo al lado, entonces es súper fácil decir, por ejemplo, un niño se enfermó y lo tengo que ir a buscar al colegio, en 10 minutos estás en el colegio, perfecto lo dejas en tu casa y vuelves. Yo creo que el vivir en provincia es un privilegio porque se logra una vida familiar compatible con el trabajo.
Cuéntanos sobre tu familia…
Estoy casada con tres niños. Exquisitos. Una niñita de 10, un hombre de 7 y una niñita de 4. Llevo 12 años de matrimonio y 5 de pololeo, en total 17. Sigo súper enamorada y espero que él también (risas).
¿Los niños te preguntan qué haces en tu trabajo?, ¿te acompañan?
A mis niños les gusta venir. La más chica dice “yo cuando sea grande quiero trabajar en Estadio Español”. Porque ellos vienen y ven la parte entretenida, que vienen a los talleres o al restorán, me acompañan a la oficina. Les gusta. Aparte que el Estadio es como una gran familia, como son 200 socios, Linares es súper chico, muchos niños se conocen, muchas familias están en el mismo colegio.
El Estadio Español, sin duda es una gran familia, ¿tú también has formado lazos, amigas y amigos?
Sí. Mucho, bueno creo que también es la personalidad. Yo llegué a Linares y conocía a muy poca gente y cuando entré a trabajar acá se me amplío un mundo. Por lo que te decía, en el fondo “ah pero tus niños también están en el colegio”. Porque ya son caras que son muy frecuentes.
Con todo lo que has crecido junto a este lugar, ¿te siente realizada o hay algo que falta?
Me siento realizada, pero tengo como un tema pendiente, siempre he pensado en independizarme, pero a la vez me da susto. Porque en el fondo pienso en eso, pero igual estoy cómoda acá. Tampoco como que me quite el sueño. Al final me siento absolutamente realizada, porque tengo una linda familia, tengo un buen trabajo, mis niños están sanos, mi marido está sano yo también y tenemos una estabilidad, que eso ahora es súper difícil. Sobre todo cuando tiene tres niños, que hay que pagar colegio, cuesta. Pero gracias a Dios todo se ha dado bien debido al esfuerzo y trabajo de nosotros.
¿Cuáles son tus proyecciones?
Mi proyección es independizarme, tener mi propio centro de eventos o mi restorán, ya que a mi marido le fascina cocinar, me dice veámoslo. Pero no sé si acá en Linares, acá como que cuesta un poco, pero igual habría que partir por acá, en el fondo uno tiene que luchar por donde uno vive y hacer crecer tu ciudad.