Luis Arriagada, diseñador gráfico y director de Agencia Forma y Espacio
UN AVE FÉNIX
Apasionado por el arte, ciclismo y por la comunicación visual, Luis Arriagada es un prestigioso diseñador gráfico chillanejo que, por motivos de salud, se retiró tres años del rubro. Hoy dice que la vida le ha dado miles de lecciones y con fuerza se reinventa para volver a demostrar su talento en su Agencia “Forma y Espacio”.
Se define como un creativo aventurero, esto porque pintar, crear, fotografiar y diseñar son técnicas que lo han acompañado gran parte de su vida. En 1979, cuando aún estudiaba en la Universidad de Chile Diseño Gráfico y Artes (mención pintura), creó “Forma y Espacio”, una agencia dedicada a la publicidad gráfica como herramienta visual para enfrentar escenarios comerciales competitivos.
Tras más de 25 años de existencia de la empresa, Luis Arriagada tuvo un gran problema de salud, alejándolo por tres años del rubro. En exclusiva para Nos Magazine, nuestro entrevistado nos cuenta sobre su vida, su trayectoria profesional, su renacer y su conquista por esta segunda etapa de la agencia.
AMANTE DEL ARTE
Nació en Concepción pero vivió su infancia en Chiguayante, donde se educó en la Escuela 30. Una infancia agradable, asegura, donde se produjeron sus primeros acercamientos al arte: pintura y coro parroquial. “Eso me permitió conocer a muchas personas y también a la ‘madre’ Marta, quien era belga y me hacía dibujar todas las portadas en relación a la música”, ríe.
¿De dónde nace el gusto por la pintura?
Desde muy chico, mi madre Juana tenía esa habilidad, lo descubrí en sus cuadernos. La primera pintura que hice fue en el colegio y tenía tan solo cuatro años, pinté el Huáscar sobre un cartón y recuerdo que el color blanco lo conseguía con la pasta de diente (ríe).
¿Cuál técnica utiliza?
La acuarela es la que más domino, pero también he realizado pinturas con pastel y óleo. Eso sí, cuando he realizado exposiciones utilizo solo una técnica, en Europa, por ejemplo, me destacaba más por el dibujo y la acuarela.
COMUNICADOR VISUAL
Estudió dos carreras de forma simultánea, Diseño Gráfico y Artes, mención pintura, en la Universidad de Chile en Chillán, ¿por qué eligió esta área?
Estudié esta carrera porque me atraía crear cosas y proyectarlas a través de las vitrinas, afiches y publicidad, lo que se transformó en el diseño gráfico publicitario. Me fue muy bien en la universidad y obtuve Premio Presidente de la República, lo que me dio la posibilidad de elegir entre dos lugares para perfeccionarme, México o España, y elegí el país del continente europeo porque estaba más lejos, me daba más oportunidades y realmente no me arrepiento.
¿En qué se perfeccionó?
En comunicación visual en la Universidad de Barcelona y ahí me convertí en Luis Ferrero, seudónimo, pues me sugirieron un nombre más atractivo. Tiempo después me convertí en alumno-profesor en Taller Gráfico y en todas las materias que tenían que ver con comunicación visual. Adicionalmente, trabajé en un proyecto de Tarragona que buscaba convertir esta ciudad en un elemento histórico dada su cultura grecorromana, así sus habitantes cambiaron su visión sobre las cosas que existieron en el pasado y comenzaron a valorarlas en otra dimensión.
Por otra parte, me desempeñé en muchos ayuntamientos rescatando símbolos de su escudo para recuperar las tradiciones.
Su desempeño laboral en los 90’ fue en España, ¿qué diferencias notó en el diseño gráfico chileno?
España estaba bastante adelantado respecto a nosotros, en Chile recién comenzábamos. Pero mi visión fue una diferencia notoria, porque como soy latinoamericano plasmaba las culturas con el estilo de los latinos, es decir, mucho color y con un ribete negro, lo que fue muy valorado en España. Así fui desarrollando todo un concepto que se fue enriqueciendo con el andar.
UN VIAJE AL INTERIOR
En 1999 Luis Arriagada vuelve a Chile, específicamente a Chillán, para continuar su labor en Agencia “Forma y Espacio”, una empresa que creó cuando estudiaba en la universidad y que siguió administrando desde España. En su retorno, se desempeñó como profesor en la Universidad del Bío-Bío y siguió en su empresa por más de 25 años.
Sin embargo, das una pausa por tres años tras un accidente…
Sí, la vida me ha dado muchas lecciones, cada viaje para mí es una aventura y estos tres años de pausa me han hecho pensar también en cómo enfrentar el mercado que cada vez se hace más complejo.
Realizas yoga hace 25 años, ¿cómo te ha ayudado esta disciplina?
El yoga me ayudó a revivir y me ha ayudado de muchas situaciones complejas, creo que el respirar, reflexionar, concentrarse y pensar en ti es positivo, es relajo y concentración absoluta.
Y además practicas ciclismo…
Sí, tengo dos hobbies. Uno que tiene que ver con el deporte, la montaña y la bicicleta, lo practico hace 20 años y hago ciertas destrezas, la verdad es que me gusta mucho. Pero, por otro lado, soy comunicador visual, el que me guste la pintura, la acuarela y lo siga desarrollando me hace bien.
¿Filosofía de vida?
Disfrutar de la naturaleza que queda y hacerla parte de tu vida, te hace pensar en la ecología como un elemento clave. También rescatar culturas y mantenerlas en el tiempo.
LA SEGUNDA ETAPA
Tras tres años de pausa, Luis Arriagada se encuentra en proceso de reapertura de la agencia “Forma y Espacio”: “Siempre nos hemos diferenciado, nuestra agencia era líder en diseño gráfico porque le pusimos mucho empeño. Lo fuerte es el diseño y ahora estamos creando marcas interesantes, todo lo que es branding”, cuenta.
¿Cuáles son los desafíos actuales?
Inicialmente ordenar la casa, y eso significa conformar un equipo. No tan grande como antes, porque llegamos a tener 18 personas, pero hoy una agencia se puede desarrollar con ocho personas dada la tecnología.
Con toda su experiencia, ¿qué le ha parecido la evolución del Diseño Gráfico?
Yo creo que estamos en un período de transición, pero pienso que el que no sea diseñador gráfico con el lápiz, difícilmente va a lograr concepciones visuales que sean más entretenidas. Creo que esta transición tiene que ver en que exista una parte análoga, hacer un boceto preliminar antes de ir al computador, porque si te enfrentas a la pantalla inmediatamente entonces vas a encontrar soluciones en Internet. Hay que llegar a la combinación exacta entre lo análogo y lo tecnológico.
Por último, ¿qué mensaje les entregarías a los estudiantes de esta carrera?
Tenemos que hacer un viaje en el tiempo y llegar al presente, hay que seguir en las técnicas manuales, artísticas, para llevarla a los computadores. También les diría que investiguen sobre las culturas, porque son milenarias y hay que recoger aquello.