Su gusto por la música comenzó desde niño (5 años). Sobre todo gracias a la influencia de su abuelo que era profesor normalista, José Miguel Rodríguez, el que dibujaba, pintaba, hacía música en piano, entre otras cosas. Todo eso despertó la inquietud en Felipe, quien actualmente integra la banda Caravana Cósmica con la cual sacará su primer disco este año.
“Yo viví en Chillán desde los 2 a los 15 años y mis padres, que eran profesores universitarios, obtuvieron una beca para irnos todos (tengo una hermana) a España, lo que coincidió con mis últimos tres años de enseñanza media. Allá estudié Historia de la Filosofía, Griego, Latín e Historia del Arte, la cual me gustó mucho. Quise cursarla allá pero no se pudo; posteriormente en Chile la tenía como primera opción pero me di cuenta que acá había pocas posibilidades para desarrollarme de la manera que yo quería”, cuenta Felipe.
En ese punto de su vida surgió la psicología. “Siempre me llamó la atención el hecho de entender a las personas, qué pasaba en la mente del ser humano y eso vincularlo con el proceso creativo”.
¿Cómo los integraste?
Creo que aún no los termino de complementar del todo. Estoy en un proceso de equilibrar ambos intereses. Recuerdo que mientras cursaba la carrera, sentía que no me encantaba del todo. Los veranos eran mi escape hacia el arte y específicamente hacia la música. Solo en el último año, descubrí la psicología clínica y ahí debo confesar que me enamoré de esa rama, tanto así que luego estudié un pos-título en psicología clínica.
¿Por qué psicología clínica?
Siempre he creído que en la interacción con las personas uno puede aprender, sacar cosas nuevas de uno mismo y de los otros. Además, descubrí que son las propias personas las que resuelven sus problemas y desarrollan sus propias herramientas con la guía que como profesional les puedo brindar.
¿Dónde conectan la psicología y la música?
En el estudio de las emociones, el comprender los distintos lenguajes que podemos usar para acceder a la diversidad de emociones que podemos experimentar en nuestra vida.
Y el tema de componer
Siempre estuvo. Crear es algo que siempre me ha gustado desde que tengo uso de razón. Lo mío eran los cuentos, las historias… a los 7 años compuse mi primera canción.
En 2010-2011 grabé mi primer disco “Raíces del Cielo” que está en Youtube y en SoundCloud, que mezcla el rock, blues, jazz y la música autóctona chilena. Después me dediqué en la música clásica.
Respecto de las temáticas, son variadas. Actualmente, con mi banda (Caravana Cósmica) la motivación principal es el movimiento porque es una banda de soul, con historias cotidianas y diversas. Es un disco bien bailable y tiene temas de gran calidad, por lo que esperamos tocarlo en todo Chile.
¿Cuáles son tus referentes?
La gracia de la generación millennial es que tenemos muchos referentes. Queen me encanta, así como la música clásica, el soul y cosas nuevas que van saliendo. También siento como referentes a gente de Concepción, porque actualmente estoy dirigiendo un centro cultural y veo muchos talentos.
Cuéntanos sobre el Centro Cultural
Se llama “La esquina rosada” y la fundamos con varios amigos hace casi tres años, con una visión política y cultural centrada en que la colaboración es mejor que la competencia, rescatando lo mejor de cada creador. Otra motivación importante era tener un espacio que congregara a escritores, pintores, poetas, actores, etc., donde nos pudiéramos encontrar y colaborar en diferentes proyectos. Hoy somos un equipo de 20 personas que han contribuido con sus propias visiones humanas y artísticas.
¿Cuál es tu proyección?
Espero que la banda tenga un alcance nacional e internacional. Y como músico me gustaría tener la posibilidad de dedicarme a la música y vivir de eso.
@fel.rdz
@laesquinarosada
@caravanacosmica
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#CaravanaCosmica