“Higiene dental”: LO ESENCIAL PARA LA SALUD Y BIENESTAR BUCAL
El cepillado, la limpieza con hilo dental, el enjuague bucal y la visita periódica al dentista son cuatro hábitos indispensables para una boca sana. También, es importante el control de la ingesta de algunos alimentos y evitar hábitos poco saludables como el cigarro.
Tres cepillados diarios es lo ideal para mantener una buena higiene bucal, ya que ésta comienza por el correcto lavado de los dientes, paredes internas de las mejillas, lengua, paladar y encías. Es conveniente que este procedimiento se realice luego de cada comida, especialmente cuando se ingieren alimentos altos en azúcares y carbohidratos. Además, es importante no olvidar el cepillado después de la cena o de la última ingesta antes de dormir.
El cepillo idóneo debería ser de tamaño mediano y de cerdas y mango recto. Durante el cepillado deben introducirse los filamentos del cepillo en el espacio que se forma entre las piezas dentales y se recomienda cepillar los dientes por un tiempo de tres a cinco minutos; es decir, diez cepilladas por cada dos dientes. Junto a ello, es necesaria la utilización de hilo y enjuague dental.
Hay que destacar que es importante que el odontólogo indique cómo debe ser la higiene oral de cada paciente de acuerdo con sus necesidades, por ello, las visitas periódicas al dentista se suman a los pasos para mantener una boca sana.
Si se observa un sangrado en las encías con un cepillado normal, puede estar en presencia de gingivitis, una de las enfermedades bucales más comunes. En ese caso, debe acudir a su dentista para que evaluar la situación y si es necesario practicar una limpieza y tratamiento adecuado.
Enfermedades odonto-estomacales más comunes:
- Caries
Pueden ser una o varias grietas que se presentan en los dientes causadas por los ácidos de los alimentos en descomposición. Su aparición es provocada por la deficiente higiene bucal y la ingesta de comida azucarada.
- Gingivitis
Se genera por un mal cepillado de dientes, el escaso uso de hilo dental y el tabaquismo. Consiste en la inflamación de las encías por la presencia de bacterias o la acumulación de placa bacteriana y sarro.
- Periodontitis
Es una infección progresiva de las encías y pérdida del hueso alrededor del diente, lo que provoca el desprendimiento de las piezas dentales. En la mayoría de los casos esta enfermedad es consecuencia de la acumulación prolongada de placa bacteriana y sarro en los dientes.
Se detecta por el enrojecimiento intenso de la encía, inflamación y sangrado leve al comer o durante el cepillado.
- Cáncer Bucal
Se manifiesta a partir de cualquier llaga, inflamación o úlcera que dure mucho tiempo. La boca puede albergar gérmenes y bacterias producto de una mala limpieza ocasionando este tipo de enfermedad.
El tabaquismo, alcoholismo, dieta deficiente en vitaminas A, E, y hierro, una infección viral o la exposición excesiva al sol también son factores determinantes para el desarrollo del cáncer bucal.
- Halitosis
El mal aliento es consecuencia de la acumulación bacteriana en la boca y entre los dientes o de restos de comida alrededor de las encías y la lengua.
Si cree sufrir algunos de estos problemas es importante visitar al dentista para el desarrollo de un diagnóstico y recibir un adecuado tratamiento dental.
