Actualmente el trabajo en equipo es un requisito indispensable para lograr resultados óptimos en el ámbito de la odontología. La clínica dental que no logra integrar un buen equipo de trabajo tendrá siempre serias dificultades para concretar tratamientos de alta calidad, puesto que el recurso humano es insustituible y más en esta área profesional, donde siempre es necesario contar con colaboradores que además de conocimientos, posean habilidad y voluntad de hacer bien sus funciones diarias.
Además, va de la mano con el enfoque integral, pues al estar todos los profesionales en un solo espacio funcional y desempeñándose dentro de una misma filosofía de trabajo, se logra desarrollar una relación amistosa que incide positivamente en la calidad del trabajo, lo que beneficia directamente a los pacientes y contribuye al buen ambiente laboral y las buenas relaciones entre los miembros del equipo, donde todos saben la importancia del trabajo grupal, lo que a su vez estimula la creatividad y motivación para buscar soluciones efectivas con resultados exitosos.
Pero ¿qué es trabajo en equipo? es el establecimiento de relaciones de entendimiento y comprensión que giran alrededor de la confianza, la responsabilidad, la ética, la voluntad, la comunicación y el constante perfeccionamiento; pues no se debe olvidar en ningún momento que todos los colaboradores que son parte de un mismo proyecto tienen y comparten un propósito común, que es cultivar y fortalecer el prestigio de la clínica y sus servicios. En la medida que el prestigio de la clínica se expanda y se difunda de forma diversa por los canales sociales disponibles, el mismo será valorado por todas las personas, incluyendo la competencia.
¿CUÁLES SON LOS BENEFICIOS PARA LOS PACIENTES?
La suma de las capacidades y talentos son la mejor garantía para un trabajo bien hecho. Por ejemplo, en Clínica Bi-Odent cada paciente tiene un dentista de cabecera pero la mirada de su situación es multidisciplinaria, donde mediante reuniones de casos se va determinando cuáles son las especialidades para cada tratamiento, eso brinda un plus al encontrar todo en un solo lugar.
LIDERAZGO POSITIVO
Pero también un aspecto a considerar y que resulta fundamental es tomar en cuenta que un equipo podrá tener todo a su disposición, pero si no tiene a la persona idónea que lo dirija y se encargue de velar porque los parámetros de calidad se mantengan y que además de ello impregne disciplina y pasión, puede convertirse en un equipo sin un sello diferenciador; podrá existir la mejor tecnología y los mejores materiales dentales, pero si no existe un liderazgo que direccione y audite la calidad de los tratamientos que se realizan, estaremos en presencia de un esfuerzo perdido. Una dirección que inyecte responsabilidad y que mantenga vivos los indicadores de calidad, siempre será necesaria en cualquier momento del proceso.
Dra. Karen Hizmeri Blanco
Especialista en Implantología y Directora Clínica Bi-Odent
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